Un plato tradicional de Huelva muy popular, sencillo y aromático que suele tomarse como tapa o entremés, un picoteo delicioso que, como lo pruebes, es que no paras.
Es un plato de temporada antiguo, con conocimiento y con lo que da la tierra en primavera, como una manera de celebrarla y compartir con amigos.
Se hace con habas de grano muy grueso cocidas con poleo fresco, ajo fresco y, en mi caso, un poco de hierbabuena, también una rodaja de limón para que no se oscurezcan.
¡Así de fácil y así de buenas!.
*Una vez desgranadas las habas el peso se queda en la mitad. Yo compré 1 k y medio de habas que se quedó en 800 g.
*Dónde te venden las habas te proporcionan el poleo, el ajo fresco, hierbabuena...
- 1 k y medio de habas muy gruesas (para enzapatar)
- 1 ajo fresco grueso o 3 más pequeños
- 1 manojo de poleo fresco
- Una rama de hierbabuena
- 1 rodaja de limón
- Sal
1 . Desgranamos las habas y enjuagamos el ajo, poleo y la hierbabuena, cortamos también una rodaja de limón.
2 . Mientras desgranamos las habas ponemos a cocer agua, en una cacerola, con sal generosa. La cantidad de agua es sobre la mitad de la cacerola.
Cuando el agua rompa el hervor añadir las habas. Esto le proporciona un bonito color verde.
Agregar también el poleo, la hierbabuena, el ajo fresco pelado y cortado por la mitad, si es muy grueso.
Poner también la rodaja de limón que le va a mantener su color verde y evita que se oscurezcan.
Cocer a fuego medio-bajo, tapadas, hasta que estén tiernas. Ir probando de sal y rectificar. Las tuve cociendo una media hora, pero lo mejor es ir probando hasta que estén tiernas a tu gusto. Las prefiero tiernas y untuosas por dentro y con la piel entera por fuera..
Una vez tiernas, separar del fuego y dejar enfriar sin tapadera.
¡Servir con su caldito!.