Estas judías tienen un gran sabor, como acompañamiento de carnes o pescados funciona de maravilla, y se hace con poco. Es conveniente respetar la cocción de las judías, que luego se unirán a la cebolla y ajos pochados, para que que resulte un plato exquisito en su sencillez. Y un buen pimentón.
El color verde nos lo regala la naturaleza con generosidad y se debe a su contenido en clorofila. Nuestras verduras son ricas en antioxidantes, vitaminas C, K, E, y son, además de ricas, esenciales en nuestra alimentación.
Ingredientes:
- 300 g de judías verdes
- 1 cebolla
- 3-4 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 cucharada sopera de vinagre
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
1 . Quitar los extremos leñosos a las judías. Como utilicé judías estrechas (redondas), no le quité las hebras de los lados. Cocer 7 minutos en agua con sal, escurrir y reservar.
*Si echas las judías de golpe en el agua hirviendo se acentúa su color verde.
2 . Cortar la cebolla por la mitad y estas en rodajas. Partir los ajos por la mitad a lo largo con la piel.
Freír ambos en sartén con un poco de aceite de oliva. Poner algo de sal. Remover de vez en cuando.
Una vez frito, añadir la cucharadita de pimentón, remover, agregar las judías inmediatamente, remover un poco más y agregar la cucharada de vinagre. Reducir unos momentos y listo.
Solo queda servir en una bandeja y apartar al gusto.
