Estas albóndigas pueden convertirse en un entrante de lujo. Le llamo albóndigas de verano porque van frías, a temperatura ambiente, y aliñadas de una rica vinagreta con rúcula.
Una alternativa básica de la cocina tradicional. Solo van fritas no se cuecen en ninguna salsa. Se hacen rápido pero, eso sí, hay que darles forma. Lo mismo da que sean redondas o alargadas. El resultad es un plato fresco, y muy sabroso, con el toque crujiente de la rúcula y el extra de la vinagreta.
*Si no quieres freírlas, se pueden hornear, todas a la vez, en la bandeja del horno forrada de papel vegetal, hasta que se doren.
Ingredientes:
- 500 - 600 g de carne picada
- 1 huevo crudo
- 1 rebanada de pan
- 2 dientes de ajo
- Unas ramas de perejil
- Pimienta negra molida
- Cúrcuma
- Pizca de tomillo
- 1 - 2 cucharadas de salsa de soja
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
- Harina y huevo batido para rebozar
Vinagreta: 6 cucharadas de aceite de oliva, 1 cucharada de vinagre, 1 cucharada de zumo de limón, pizca de jengibre, pizca de sal
1. Las albóndigas:
Pan, ajo y perejil lo trituramos y lo mezclamos con la carne y el huevo, pimienta, cúrcuma pizca de tomillo y algo de sal.
Echar también las cucharadas de soja. Remover. Dejar reposar un ratito para que el pan se esponje.
2 . Formar las albóndigas, más bien pequeñas.
*Para darles forma humedece las manos con agua.
Rebozar en huevo y harina. Freír a fuego medio hasta que se doren.
*Si las fríes por tandas en un cazo pequeño, se fríen mejor y con menos aceite.
Deben quedar hechas porque ya están terminadas, solo falta el aliño de la vinagreta y la rúcula u otro acompañamiento de brotes verdes que prefieras.
Apartar sobre papel absorbente.
3. La vinagreta.
Mezclar en un cuenco todos los ingredientes de la vinagreta. Remover hasta que emulsione. Probar y rectificar al gusto. Si te gusta con más sabor a limón puedes poner algo de ralladura (solo la parte amarilla).
Servir en platitos o bandeja regados con la vinagreta y los brotes de rúcula.
