Una reconfortante sopa con textura cremosa con trocitos de merluza y bocaditos de langostinos salteados. La sopa siempre viene bien con tanto ajetreo veraniego o en fiestas, y no es que sea la típica sopa de enfermo porque lleva su langostinito y algo de vino, pero sienta de maravilla. Una sopa muy saludable para cualquier ocasión.
- 300 g de merluza o pescadilla cortada a porciones
- 1 langostino por persona
- 1 cebolla
- 1 puerro
- 1 zanahoria pequeña
- 1-2 ramas de apio
- Perejil
- 1 copita de vino blanco o manzanilla
- 1 puñadito de arroz por persona (150 g aproximadamente)
- Aceite de oliva
- Pimienta
- Sal
Pasados 10 minutos introducimos las porciones de merluza procurando no romperlas. Sacamos del cazo cuando estén tiernas y colamos el caldo. Dejamos en espera.
2 . En cazuela aparte ponemos 2-3 cucharadas de aceite y rehogamos la cebolla, el puerro y la zanahoria.
A continuación echamos el arroz, removemos y agregamos el vino y el caldo anteriormente preparado. Este último a medida que lo vayamos necesitando porque es sopa y debe quedar caldoso.
Una vez tierno el arroz batimos. Rectificamos de sal.
Si la textura nos parece espesa, le agregaremos algo mas de caldo.
Hay que tener en cuenta que esta sopa espesa un poco mas, a medida que se va enfriando.
3 . Troceamos o laminamos los langostinos y los salteamos con unas gotas de aceite y pimienta rosa.
Servimos la sopa con la porción de merluza y los trozos de langostinos.
¡Lista!