Ayer caminando por la playa intenté dejar atrás los
pensamientos, esos que nos atrapan de forma desordenada, y centrarme solo en lo
que veía, en las aguas brillantes, en el olor a mar y en el sol poniente. Me
dejé llevar por la belleza que tenemos tan a mano, porque… ¿Cuántas veces
pasamos por los sitios y no los vemos?
Son muchas las cosas que nos desvían de lo importante. Pero teniendo en cuenta que lo importante es
diferente para cada uno… ¿Qué nos hace felices y auténticos?
Pienso que a este
ritmo que nos han impuesto, pendientes solo de nuestro apresurado destino, la
única opción es parar, respirar hondo y, al menos, quedarse en blanco unos
minutos como rutina. Seguro que llegan respuestas.
Es bueno mirar a nuestro alrededor con ojos de
agradecimiento y descubrir la belleza que este mundo nos ofrece y disfrutarlo.
Nos lo da Todo, solo espera ojos que miren con el corazón. - “Nos falta Fe,
tenemos mucho que aprender” - como dice la canción.
A fin de cuentas el mundo no es solo lo que vemos, sino
lo que sentimos, un mundo, para infatigables buscadores de la felicidad, donde
hacer realidad eso que llaman sueños imposibles.