Crumble de manzana y arándanos

 El crumble es un pastel con una masa arenosa y crujiente, a base de harina, mantequilla y azúcar, que cubre frutas generalmente. Un postre fácil y absolutamente rico. Gusta muchísimo. ¡Comprobado!.

El dúo manzana-arándanos es perfecto para mi gusto, aunque se trata de dos frutas muy diferentes tanto en sabor como en textura, se complementan quedando una mezcla deliciosa y con un llamativo color.

Se cree que el origen del crumble es británico y que nació debido al racionamiento de alimentos durante la Segunda Guerra Mundial.

Es muy fácil, primero cocemos brevemente las frutas, luego ponemos la masa grumosa por encima y doramos un poco en el horno. 


Ingredientes:
Para la fruta:
  • 2 manzanas
  • 250 g de arándanos
  • 1 cucharadita rasa de canela
  • 2 cucharadas de azúcar morena o edulcorante de tu elección (stevia. sirope de agave..)
  • 1 cucharada sopera de Flanín o Maizena
  • Pizca de sal
  • 6 cucharadas de agua
Para la masa crujiente (crumble):
  • 170 g de harina ( o, 120 g de harina+50 g de copos de avena)
  • 80 g de azúcar moreno
  • 115 g de mantequilla sin sal
  • 1 cucharadita de canela
  • Pizca de sal
*He usado harina integral +avena porque el resultado es genial y más saludable.
*¿Porqué flanín? Porque es Maizena con un toque de vainilla que me gusta mucho y no lleva azúcar.. Pero puedes usar solo Maizena si así lo prefieres.

Precalentar el horno a 200ºC.

1 . Pelar las manzanas y cortarlas a cuadritos. 
Ponerlas a cocer, a fuego lento, unos minutos con un poco de ralladura de limón y 3 cucharadas de agua. Si quieres le echas un chorrito de vino dulce (opcional). Si tapas la cacerola, se ponen antes tiernas.
Cuando las manzanas estén tiernas agregar los arándanos, la cucharadita de canela molida, la cucharada sopera de flanín o Maizena, las 2 cucharadas de azúcar, pizca de sal y seis cucharadas de agua. Remover y cocer tapado 5 minutos a fuego lento. Hay que remover de vez en cuando por si necesitara algo más de agua.
Loa arándanos van a soltar algo de sus jugos y aporta su precioso color.
Así ya tenemos la fruta tierna y cremosa y con un riquísimo sabor.
Repartir la fruta en un cuenco grande apto para el horno. Esta vez he usado dos medianos.
Dejar en espera y vamos con la masa que se hace rápido y sin ninguna complicación.
2 . Poner en otro cuenco la harina y la avena, el azúcar moreno, la mantequilla, la canela y la pizca de sal.
Remover apretando con los dedos hasta que quede todo integrado y con aspecto grumoso. Quedará algo oscura por el azúcar moreno.
Poner la masa por encima de la fruta y hornear de 15 a 20 minutos a 200º calor arriba y abajo, posición media-baja del horno, hasta que se dore un poco.

Verás que la fruta burbujea y sube un poco por los bordes. ¡Está en su punto!.
Es normal que se coma caliente, pero yo lo prefiero a temperatura ambiente.
Os aseguro que es una delicia, un rico bocado de fruta y masa crujiente para no perdérselo.
Servir en platitos.