Las espinacas son un rico bocado y con la base de pan y gratinadas con queso, está comprobado que les encanta a los más jóvenes. No quedó ni las migas.
Las verduras son esenciales para una alimentación saludable. Este plato es para disfrutar de sabores tradicionales, aunque la presentación de las espinacas en el plato no lo parezca. Este plato también se puede utilizar como entrante o entremés.
Ingredientes:
- 2 bolsas de espinacas frescas (de 300 g cada una)
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharadita rasa de cominos
- 1 cucharadita de pimentón dulce (de la Vera)
- 1/2 guindilla pequeña (opcional)
- Sal y aceite de oliva
1. Poner en una cacerola un poco de agua (con algo de sal) a hervir y echar las espinacas previamente enjuagadas. Es mucho volumen pero a medida que hiervan se quedan en nada. Solo un hervor, remover porque las de abajo enseguida se cuecen. Así mantienen un bonito color.
En dos minutos quedan así, solo hay que pasarlas a un escurridor y cuando estén frías apretarlas entre las manos para que escurran muy bien.
2 . El gran sabor lo proporciona un majado de dos dientes de ajo y una cucharadita de cominos en grano.
Machacar con una pizca se sal.
Poner en una sartén 3 cucharadas de aceite a calentar y echar el majado, y si quieres puedes poner también una guindilla pequeña, o media.
Freír un poco y añadir la cucharadita de pimentón, remover e incorporar las espinacas.
Freír un poco más y probar de sal.
3 . Solo queda ponerlas en una fuente pequeña para horno, espolvorear con queso rallado y gratinar a 250ºC (solo grill) unos minutos hasta que el queso se dore un poquito.
Se pueden hacer sin base de rebanadas de pan o con la base de rebanadas. Al gusto.
Este lo gratiné con parmesano rallado.
Y este va gratinado con mezcla de 4 quesos con un rallado grueso y queda excelente.
