Para este plato se puede utilizar perfectamente una buenas judías "de bote" que simplemente vienen ya cocidas, sin sabores añadidos. Hay días que apenas tenemos tiempo para cocinar y si se trata de alubias lleva su tiempo, de esta manera ahorramos tiempo pero no sabores. El resultado merece la pena. Se trata de hacer un buen refrito, añadirlo a las judías y echar el atún previamente aromatizado.
Las alubias son fuente de proteínas saludables, baja en grasas y muy beneficiosas para los intestinos.
Ingredientes para 2-3 personas:
- 1 bote de judías
- 250-300 g de atún fresco
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 trozo de pimiento rojo o 1 cucharadita de pimentón
- Majado: 1 diente de ajo+ perejil+ pizca de sal+ chorrito de aceite
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal, pimienta y pizca de comino
* Si a alguien no le gusta el pimiento, se puede sustituir por una cucharadita de pimentón y queda de maravilla. Aunque yo puse los dos.
*El atún que usé es del morrillo del atún, una pieza pequeña y muy jugosa.
1 . Poner el atún troceado y echar el majado para que vaya tomando sabor.
2 . Echar las judías en un escurridor y enjuagarla un poco bajo el grifo.
En una olla pequeña poner un poco de agua (al ras), con una hoja de laurel y pizca de sal, dar un hervor para que tome sabor y echar las judías, calentar un poco y dejar en espera.
3 . En una sartén poner dos cucharadas de aceite, calentar y echar el trocito de pimiento (si has decidido ponerlo), la cebolla y el ajo todos muy picaditos. Algo de sal. Freír a fuego lento hasta que tomen color.
Una vez fritos, sería el momento de echar el pimentón.
Incorporar el refrito a la olla. Pizca de pimienta y pizca de comino.
Y por último echar el atún y un chorrito de vinagre que le aporta un rico sabor y, al contrario de lo que pueda parecer, no deja sabor fuerte, sino un toque bien bueno.
Hervir todo apenas 5 minutos, apartar y dejar reposar hasta la hora de comer.
Salen unos platos generosos, suculentos y saciantes.