Un entrante que siempre es un éxito y lleva muy poco tiempo, lo suyo es hacerlos y comerlos enseguida con su salsa al ajillo por encima. Esta vez ni siquiera los pelé, tal cual y riquísimos.
Los langostinos los puedes usar frescos o congelados. Si los compras frescos, y no lo vas a utilizar en el mismo día, es mejor congelarlos y siempre los tendrás disponible y en perfecto estado. A la hora de usarlos procura que estén bien descongelados.
Ingredientes:
- Medio kilo de langostinos
- 4 dientes de ajo laminados
- 2-3 cayenas pequeñas (opcional)
- Medio vaso de vino blanco (el vaso es grande, tamaño de los de agua)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
*Otro ingrediente es el pan para mojar en la salsa....
1. Echar en una sartén un buen chorreón de aceite y freír los ajos laminados junto con las cayenas.
2 . Incorporar el vino blanco y hervir a fuego fuerte durante 1 minuto. Probar y rectificar. Los langostinos deben quedar hechos por dentro, blancos, no transparentes, pero jugosos.
*Si están recién sacados del frigorífico, tardarán un poco más en hacerse por dentro que si hubieran estado a temperatura ambiente...
*Una vez hecho esto ya se pueden poner en una fuente de servir, pero a mi me gusta sacar los langostinos para ver la salsa sola y rectificar si fuera necesario.....
.... sacar los langostinos, con ayuda de una espumadera, a una fuente. La salsa, que estará muy caliente, se la echaremos por encima a los langostinos y ya pueden ir a la mesa.
Solo queda tener el pan a mano para mojar en la salsita....