Sencillos y exquisitos en su salsa. Solo con ajos, aceite de oliva y una guindilla se saltean estos langostinos y listos para disfrutarlos, pero también, si pones una hoja de laurel y chorrito de vino blanco... quedan riquísimos y una salsita extraordinaria.
Ingredientes:
- 1/2 kg de langostinos frescos o congelados
- 4 dientes de ajos
- 1- 2 guindillas
- 1 hoja de laurel
- Chorrito de vino blanco (50 ml, o un poco más)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
1. Pelar los langostinos.
2. En una sartén con un buen chorreón de aceite de oliva, freír los ajos laminados y la guindilla.
Incorporar los langostinos, sal, laurel y el chorrito de vino. Saltear hasta que los langostinos queden tiernos y en su rica salsa. Cuestión de 3 minutos. Probar, y rectificar si hiciera falta.
Me gusta llevarlos a la mesa en la misma sartén, y compartirlos así, calientes y jugosos.