Los espaguetis siempre solucionan una comida sea cual sea su preparación, pero en la variedad está el gusto, como se suele decir.
Esta vez con toque de color verde, que también aporta un rico sabor gracias al ingrediente que les da ese color: las espinacas. Para rematar sabores, las gambas al ajillo coronan este sencillo plato de espaguetis y lo convierten en un manjar.
Las espinacas van cocidas y trituradas, luego rehogadas con ajitos fritos en aceite de oliva...los espaguetis la acogen de maravilla. He utilizado nuestra gamba blanca de Huelva con su especial textura y sabor. Una experiencia de sabores deliciosos.
Ingredientes:
- 400 g de gambas
- 1 bolsa de espinacas de 300 g (solo vienen las hojas)
- 6 dientes de ajo grandes (2 para las espinacas y 4 para las gambas)
- 1 cayena
- Sal y aceite de oliva virgen extra
Enjuagar las espinacas. Cocerlas en agua con algo de sal, unos 4 minutos. Reducen mucho,
Escurrir en escurridor y dejar enfriar. Una vez frías apretar entre las manos para escurrirlas más y las trituramos con trituradora o procesadora.
En una cazuela con 3- 4 cucharadas de aceite, freír los dos dientes de ajo muy picaditos y echar las espinacas, remover mientras las rehogamos para que se integre con el aceite y quede como una pasta espesa.
Probar de sal y rectificar sabores. Dejar en espera.
2. Los espaguetis:
Pelar las gambas y ponerlas en un plato.
Con las cáscaras hacemos un caldo con agua y un poco de sal en una olla. Hervir unos 10 minutos para potenciar el sabor.
En ese caldo, colado, hervir los espaguetis según indique el paquete.
Cuando esté al dente escurrir la pasta rápido, no excesivamente y así calentita echarla en la cacerola con las espinacas.
Mezclar para integrarlas muy bien.
3. Las gambas al ajillo se hacen en un momento:
Solo hay que poner las 4 cucharadas de aceite en una sartén, freír los ajos laminado finos sin que lleguen a dorarse, echar las gambas, una cayena y un poco de sal.
*Opcionalmente le puedes echar un chorrito de vino blanco.
Remover y dejar hacer 1 minuto a fuego más bien fuerte.
Cambian de color y sueltan sus jugos. Deben quedar jugosas.
Servir los espaguetis verdes en plato hondo y las gambas por encima bañadas con su salsa
